Demostrar confianza en el lenguaje corporal

Aprender a demostrar que somos hombres con confianza en nosotros mismos no es tan difícil cuando se sabe utilizar bien el lenguaje corporal.

Lenguaje Corporal
Lenguaje Corporal

El lenguaje corporal, como ya lo hemos comentado en artículos anteriores titulados 10 formas de mostrar confianza con el lenguaje corporal y Transmitir confianza, aprendiendo del lenguaje corporal, es importante porque complementa nuestra comunicación verbal y nos permite influir –de alguna manera–, en la actitud de quien interactúa con nosotros sin que éste se dé cuenta.

8 Sonreir

Las personas que tienen confianza en sí mismas sonríen todo el tiempo, pues interiormente saben no tienen de qué preocuparse y eso lo exteriorizan a través de una sonrisa de aquellas que habitualmente las féminas llaman “encantadoras”.

Una prueba interesante que toda persona puede hacer, para ver el efecto que genera una sonrisa, es sonreírle a otra persona cuando pase a nuestro lado, notaremos inmediatamente cómo nos devuelve una sonrisa aún cuando no nos conozca. Si esto ocurre incluso con desconocidos ¿Sabemos lo que generaríamos si lo practicáramos todo el tiempo en nuestras relaciones personales?

9 Evitar cruzarse de brazos

Es común ver que las personas se cruzan de brazos, pero ¿Sabemos lo que significa? En el mundo del lenguaje corporal llegar a cruzar los brazos significa “protección”, es decir, le estamos diciendo al otro que no nos sentimos cómodos y que adoptamos una postura defensiva de inmediato.

Podríamos resumir que hay tres situaciones en las que se cruzan los brazos, cuando hace frío, se está en guardia o hay nerviosismo.

La imagen perfecta que debemos hacernos de este cuadro es el típico guardia de discoteca, aquel que por lo general es sumamente alto, no tiene una mirada agradable y está en todo momento con los brazos cruzados ¿Hablaríamos con esta persona? ¿Le haríamos bromas a este guardia? Ciertamente no, y ello porque nos está enviando el mensaje correctamente ¡No se metan conmigo!

Nuestro trabajo, a diferencia de lo que ocurre con el guardia de la disco, no es apartar a la gente o intimidarla, sino todo lo contrario y por ello tendremos que aprender a sonreír con naturalidad cuando nos comunicamos con alguien o queremos amenizar el ambiente antes de iniciar una conversación.

10 Usar el contacto físico para mostrar aprecio

La típica palmadita en la espalda de la que tantos hablan mal es efectiva, y si se aprende con quién y cuándo utilizarla genera efectos positivos en la comunicación que se intenta sostener. No hay que sentir miedo de darle una palmadita en la espalda a un colega con el que tengamos amistad, así como tampoco a hacer un leve toque en el brazo si ha dicho un buen chiste, pues eso demuestra cercanía y confianza.

No obstante lo que hemos dicho, hay que tener presente que este consejo es discrecional, ya que hay personas a las que no les gusta la toquen o ven en un toque de hombro una insinuación aún cuando venga de alguien de su propio sexo, sin mencionar que los jefes o supervisores muchas veces lo ven como un exceso de confianza peligroso, por lo que hay que cuidarse de generar este efecto.