Permalink Submitted by JoseLuis on Jue, 07/17/2014 - 19:49
Todo lo que describe este artículo define mi relación, define a mi mujer. Yo además he vivido secuestros, de una o dos horas, en una habitación, para no dejarme salir; fueron más de 20 secuestros, con llamada a la policía y todo, y ni con esas reacciona de que eso está mal, y me culpa de sentirse traumatizada por haberlos llamado. Tiene un control excesivo, y es violenta en todo, verbalmente, desprecia a todo el mundo, somos todos perversos e inferiores y ella es pura y maravillosa. Tiene una obsesión con la limpieza terrible, a niveles que me está humillando todo el día por que por mucho que me esfuerce nunca dejaré las cosas como ella quiere. Mientras limpia la casa es cuando le sale el peor carácter. Y también cuando salimos a la calle porque todas son “warras” potenciales y yo soy una persona que hay que controlar porque seguro que le pondré los cuernos en cuanto se dé la vuelta. Por supuesto me controla el móvil, los correos, me pide explicaciones en todo lo que hago, no puedo hablar con nadie por teléfono, ya estoy aislado socialmente, perdí toda posibilidad de trabajar, y vivimos precariamente en parte por culpa de esto. No he podido hacer cursos de formación (como dejarla sola, pobrecita, y yo irme de fiesta a hacer un curso), ni ir a entrevistas de trabajo (un día me secuestró y no dejó que fuera a un curso de selección). Nuestra vida se redujo a estar encerrados en casa y yo he perdido la ilusión por todo: no tengo amigos, no tengo trabajo, no sé qué me gusta y que no porque todo le parece mal; sólo conservo de mi anterior vida hacer deporte tres veces por semana (pero esto lo logré conservar después de aguantar sangre, sudor y lágrimas). Sólo soy feliz cuando estoy solo, siento liberación, me siento hasta feliz. Pasé por un odio profundo (hubo muchos intentos de ruptura), a un perdón y un amor incondicional, a estar ahora en un estado de depresión y apatía con la vida (no sé si ella tiene toda la culpa pero buena parte seguro que sí). Yo la quiero, a pesar de todo, tiene sus cosas buenas, pero he logrado muy pocos avances en estos 5 años de relación. La cosa está mejor pero a mi no me llega, me siento infeliz y agobiado la mayor parte del tiempo. Ya no sé quien soy ni que quiero en la vida, creo que he tocado fondo, y además estoy enfermo, seguramente de todo lo que llevo somatizado, el estrés constante en mi cuerpo, tantas lágrimas que ya me he quedado seco, tanto dolor, tantas humillaciones, chantajes y amenzas constantes (ella no tiene límites, puede llegar a hacerte daño en lo más querido con tal de salirse con la suya)...le he dado tantas oportunidades que pienso que soy de esas personas dependientes emocionalmente, porque ella no entiende los límites, y ni creo que la hiciera reaccionar que dejara la relación, seguirá siendo la misma. Si no fuera por un tema religioso que nos une ya hubiera puesto tierra de por medio desde el principio.
Todo lo que describe este
Todo lo que describe este artículo define mi relación, define a mi mujer. Yo además he vivido secuestros, de una o dos horas, en una habitación, para no dejarme salir; fueron más de 20 secuestros, con llamada a la policía y todo, y ni con esas reacciona de que eso está mal, y me culpa de sentirse traumatizada por haberlos llamado.
Tiene un control excesivo, y es violenta en todo, verbalmente, desprecia a todo el mundo, somos todos perversos e inferiores y ella es pura y maravillosa. Tiene una obsesión con la limpieza terrible, a niveles que me está humillando todo el día por que por mucho que me esfuerce nunca dejaré las cosas como ella quiere. Mientras limpia la casa es cuando le sale el peor carácter. Y también cuando salimos a la calle porque todas son “warras” potenciales y yo soy una persona que hay que controlar porque seguro que le pondré los cuernos en cuanto se dé la vuelta. Por supuesto me controla el móvil, los correos, me pide explicaciones en todo lo que hago, no puedo hablar con nadie por teléfono, ya estoy aislado socialmente, perdí toda posibilidad de trabajar, y vivimos precariamente en parte por culpa de esto. No he podido hacer cursos de formación (como dejarla sola, pobrecita, y yo irme de fiesta a hacer un curso), ni ir a entrevistas de trabajo (un día me secuestró y no dejó que fuera a un curso de selección). Nuestra vida se redujo a estar encerrados en casa y yo he perdido la ilusión por todo: no tengo amigos, no tengo trabajo, no sé qué me gusta y que no porque todo le parece mal; sólo conservo de mi anterior vida hacer deporte tres veces por semana (pero esto lo logré conservar después de aguantar sangre, sudor y lágrimas). Sólo soy feliz cuando estoy solo, siento liberación, me siento hasta feliz. Pasé por un odio profundo (hubo muchos intentos de ruptura), a un perdón y un amor incondicional, a estar ahora en un estado de depresión y apatía con la vida (no sé si ella tiene toda la culpa pero buena parte seguro que sí).
Yo la quiero, a pesar de todo, tiene sus cosas buenas, pero he logrado muy pocos avances en estos 5 años de relación. La cosa está mejor pero a mi no me llega, me siento infeliz y agobiado la mayor parte del tiempo.
Ya no sé quien soy ni que quiero en la vida, creo que he tocado fondo, y además estoy enfermo, seguramente de todo lo que llevo somatizado, el estrés constante en mi cuerpo, tantas lágrimas que ya me he quedado seco, tanto dolor, tantas humillaciones, chantajes y amenzas constantes (ella no tiene límites, puede llegar a hacerte daño en lo más querido con tal de salirse con la suya)...le he dado tantas oportunidades que pienso que soy de esas personas dependientes emocionalmente, porque ella no entiende los límites, y ni creo que la hiciera reaccionar que dejara la relación, seguirá siendo la misma. Si no fuera por un tema religioso que nos une ya hubiera puesto tierra de por medio desde el principio.