Con sólo una penetrante mirada eran capaces de hipnotizar al galán más conquistador, que caía rendido en sus garras. Sus armas de mujer les permitieron alcanzar el Olimpo de las diosas de Hollywood. El cine clásico nos legó el disfrute de actrices como Bette Davis, Ingrid Bergman, Rita Hayworth, Marlene Dietrich, Audrey Hepburn, Ava Gardner, Lana Turner, Marilyn Monroe o Greta Garbo, que lograron conquistar al público con su sensualidad, belleza y talento. Ellas sentaron las bases de la idealización y los cánones de la elegancia. Ahora su testigo lo recogen actrices como Scarlett Johansson, Angelina Jolie o el reciente descubrimiento de Megan Fox, la mujer más buscada en Google.

Las divas de los años treinta disfrutaron de la etapa más fructífera del séptimo arte y de la moda. Ambas partes fueron de la mano desde el tránsito de las películas mudas a las sonoras, y después al pasar del blanco y negro al color, para reencontrase con bombos y platillos sobre la alfombra roja de los premios Óscar.

Su belleza y glamour en pantalla eran cómplices de su calidad interpretativa. En pleno siglo XXI, las mejores actrices del panorama cinematográfico actual no son precisamente las más atractivas a ojos del público, carecen del encanto de aquellas damas.

La última diva del Hollywood dorado, con permiso de Elizabeth Taylor, es para muchos, Sofía Loren que, a sus 75 años de edad, parece haber pactado con el diablo. El mito erótico del cine de los sesenta y protagonista de películas como Matrimonio a la italiana, mantiene su espectacular belleza.

En la actualidad tiene en cartelera Nine, un musical del que participa junto a otras divas del cine actual: Penélope Cruz, Nicole Kidman o Catherine Zeta Jones.

Son precisamente estas actrices las que cautivan ahora los corazones de los espectadores. Todas ellas suelen ocupar alguno de los primeros puestos en las listas de mujeres más deseadas del planeta. La española más internacional en la actualidad tras la conquista del último Óscar como mejor actriz secundaria ha disfrutado de un 2009 redondo tanto en lo profesional como en el apartado personal, donde una mantiene una relación sentimental con el también oscarizado actor español Javier Bardem. Tras el galardón que le ha abierto las puertas de Hollywood, la actriz rodó Los abrazos rotos, junto a Pedro Almodóvar, y acabó el año como una de las protagonistas del musical Nine, que le puede otorgar otra estatuilla.

Angelina Jolie presume de ser una de las actrices mejor pagadas de Hollywood. A mediados del año pasado, la mujer de Brad Pitt ocupó el primer lugar en la lista de la revista Forbes. Ganó entre junio de 2008 y junio de 2009 un total 27 millones de dólares gracias a películas como Kung Fú Panda, Wanted y el thriller Salt. Aunque buena parte del dinero que gana lo destina a obras benéficas como precisamente ahora, tras el terremoto de Haití, no vaciló en donar 1 millón de dólares junto con su esposo Pitt. No en vano, Jolie es embajadora de buena voluntad de ACNUR y presta ayuda humanitaria cuando se le requiere.

El tercer lugar del vértice de las divas del cine contemporáneo lo ocupa, por méritos propios, Scarlett Johansson. A sus 25 años ya ha protagonizado más de 15 películas y se ha abierto paso como la actriz más sexy y explosiva del momento. Sus medidas están al alcance de muy pocas (94-65-97).

Pero la repentina irrupción en el cine de Megan Fox pretende robarle el protagonismo. La nueva imagen de Armani, de 23 años de edad, ha dado el paso del mundo de las pasarelas al séptimo arte y no para de acaparar las portadas de las revistas más glamorosas. Es la actual diva de Hollywood y su carrera no acaba más que empezar.