El uso de Internet se ha convertido en un “infaltable” para todos, ello por la plasticidad de su uso y los beneficios que reporta en el diario vivir, pero ¿Qué pasa en Sudamérica? Bien sabemos todos que el acceso a Internet no es idéntico en todas partes, y qué mejor ejemplo que nuestra América del Sur para demostrarlo, donde el precio del acceso a la red es altísimo y no siempre tiene buenos estándares.

Uno de los países que ofrece el servicio más caro de América del Sur, en lo que respecta al acceso a Internet, es Perú. Este país sudamericano no tiene buenos estándares de velocidad y ofrece un servicio caro si se le compara con países vecinos, por ello el gobierno peruano estimo debe considerarse Internet como de “necesidad e interés público”, lo que incluso motivó la creación de una ley que garantizará el impulso y masificación del uso de Internet en todo Perú.

Según el modo de ver que tienen las autoridades peruanas, la mejor forma de contribuir al desarrollo de esta idea es subsidiando la Red Dorsal Nacional de Fibra Óptica, con lo que conseguirán mejores estándares de calidad, velocidad y llegar a lugares donde los privados simplemente no tienen interés en invertir. Para esto la red tendrá que pasar por cerca de 194 provincias del país, en un despliegue técnico visto pocas veces.

Como era de esperarse la modalidad escogida para la implementación de este plan se basa en la “concesión”, aunque se mantendrá toda la operación supervisada por la OSIPTEL (Organismo Supervisor de Inversión Privada en Telecomunicaciones).

Aunque parezca alarmante para algunos, dada la globalización de la que somos parte, en Perú según registros del INEI (Instituto de Estadísticas de Informática) sólo el 16% de los hogares cuenta con conexión a Internet en el 2011, de entre los cuales no se detalla la velocidad de navegación aunque suponemos no es de las mejores.

Esta iniciativa, más allá de ser inteligente, contribuye al desarrollo de la llamada “súper carretera de la información”, lo que a su vez no hace más que proteger y ejercer el derecho que tienen todos los peruanos a educarse, tener acceso a mayores oportunidades de trabajo, mejorar sus canales de comunicación y acceso a la información, entre otras cosas.