Con el fin de evitar la propagación del COVID-19 para terminar con la crisis sanitaria, las autoridades recomiendas usar mascarillas siempre que salgamos de casa. De esta manera, nos protegemos a nosotros mismos y protegemos a los demás. Por tal motivo es que debemos usarlas correctamente. El confinamiento empieza a llegar a su fin y poco a poco se irán recuperando las libertades que se vieron suspendidas a causa de la propagación del coronavirus. Dentro de algunos días podremos salir a caminar o hacer deporte y visitar a los familiares. Pero, aunque el avance de la enfermedad se esté desacelerando, las medidas de seguridad y distancia deben mantenerse vigentes.

El uso de mascarillas es una de las medidas más importantes para mantener la seguridad porque no solo nos protege de posibles contagios, sino que también protege a los demás en caso de que nosotros seamos portadores del virus sin saberlo. De esta manera, si todos utilizamos mascarillas, las probabilidades de contagio descenderán notablemente y podremos frenar al coronavirus hasta que se descubra una vacuna. La protección que nos proporciona la mascarilla desciende notablemente si no la usamos correctamente, por lo que en esta oportunidad te enumeramos los cinco errores más comunes que se cometen al usarla.

1Cubrir solo la boca

Uno de los errores más comunes a la hora de usar la mascarilla es su mala colocación. Para que sea efectiva, la mascarilla debe tapar por completo la boca y la nariz. Además, debe estar bien ajustada y no deben quedar huecos en los lados por los que pueda entrar o salir el aire contaminado.

2Dejar expuesta la barbilla

La mascarilla debe cubrir completamente la boca y la nariz y debes asegurarte de que el aire que respiras se filtra a través de la mascarilla en lugar de entrar por huecos creados debido a una mala colocación. Por lo que debes tapar desde la barbilla hasta la nariz para que esta quede completamente estirada y lisa y evite que el aire entre por otros sitios que no sea a través de los filtros de la propia mascarilla.

3Llevar la mascarilla floja

Este es otro de los errores que evitan que la mascarilla cumpla su función efectivamente. Si llevamos la mascarilla floja o mal ajustada a la cara, el aire entra por los huecos que aparecen entre la cara y la mascarilla. Si queremos evitar contagios, debemos conseguir que el aire se filtre a través de la mascarilla, pues de no ser así, estamos aumentando los riesgos de contagio.

4Tocar la mascarilla mientras la llevamos puesta

Para evitar contaminar la mascarilla, debemos lavarnos bien las manos antes de ponérnosla. Mientras la estemos usando, debemos evitar tocarla, ya que podría estar contaminada y podríamos restarle eficacia. No manipules la mascarilla cuando la tengas puesta y si quieres ajustarla intenta hacerlo utilizando las tiras elásticas. Antes de quitártela, lávate las manos de nuevo y vuelve a desinfectarlas después.

5No te quites la mascarilla para hablar

Estamos habituándonos aún al uso de la mascarilla, por lo que es muy común ver en los últimos días cómo la gente se retira la mascarilla para hablar, pero es precisamente cuando hablamos con una persona que las posibilidades de contagio se multiplican porque podemos emitir fluidos que pueden ser foco de contagio. La mascarilla sirve como pantalla para evitar que esas gotitas puedan contagiar a otra persona, por lo que nunca debemos quitarnos la mascarilla al hablar con alguien, independientemente de que estemos manteniendo la distancia de seguridad.

Tipos de mascarilla

1Mascarillas higiénicas no reutilizables

Se rigen por las especificaciones UNE 0064-1 (adultos) y UNE 0064-2 (niños).

2Mascarillas higiénicas reutilizables

Se rigen por las especificaciones UNE 0065. Puedes fabricarlas en casa siguiendo las instrucciones facilitadas por los especialistas o comprarlas en el establecimiento de tu preferencia. Tienen tres capas y ofrecen una máxima seguridad. Lávalas con agua caliente y lejía después de cada uso para que queden completamente desinfectadas.

3Mascarillas quirúrgicas

Son las más comunes, no ofrecen gran protección frente a contagios, pero sí son una barrera eficaz para evitar que las personas portadoras del virus contagien. Ofrecen cierta protección para evitar que los fluidos que puedan estar contaminados lleguen a nuestras vías nasales o a nuestra boca. Son desechables y no se recomienda su uso durante más de cuatro horas.

4Mascarillas de alta eficacia

aMascarillas FFP1

Tiene una eficacia mínima del 78%.

bMascarillas FFP2

La protección que ofrecen estas mascarillas es de un 92%.

cMascarillas FFP3

Tiene una eficacia del 98% y están recomendadas para uso sanitario.

Ninguna mascarilla ofrece un 100% de protección, pues el virus puede contagiarse también a través de los ojos o parte del cuerpo que queda descubierta a pesar del uso de la mascarilla.