Hay algunas cuestiones de salud que deberían ser consideradas con más esmero en las comunidades latinas e hispanas. Atendiendo a cifras estadísticas los temas relacionados con la salud que más deben prestar atención los hispanos son los accidentes de tránsito, los accidentes laborales, las fallas en el funcionamiento del sistema cardiovascular, la obesidad, la diabetes tipo II, el alcoholismo, ciertas enfermedades autoinmunes como la celiaquía, otras intolerancias alimentarias y ciertos tipos de cánceres.

Por otra parte, se ve cierto incremento en las tasas de estrés y ansiedad reportadas por instituciones médicas, sobre todo en aquellos países hispanoparlantes más desarrollados.

En Latinoamérica, la incidencia de accidentes laborales fatales o con consecuencias crónicas es más alta que en países del primer mundo. A su vez, las comunidades latinas habitantes en USA y otros países no hispanos, se enfrentan a una barrera idiomática y condiciones de desigualdad en derechos sociales que provocan un aumento de accidentes laborales con lamentables consecuencias con respecto a los nativos.

Los países latinoamericanos con mayor solvencia económica han desplegado políticas de protección laboral en los últimos 15 años. La implementación de estos sistemas demanda, entre otras cosas, de la inversión en educación para la prevención.

Alcohol y tabaco

El consumo de alcohol y tabaco son más frecuentes en las poblaciones de bajos recursos y menores de edad, incluso, las campañas publicitarias se ponen como objetivo de sus acciones de marketing, estos grupos por ser más vulnerables.

Es un problema frecuente en América del Sur el desarrollo de conductas adictivas con respecto a la nicotina y al alcohol a edades muy tempranas. Se relaciona esto con el carácter festivo que se le da al consumo de alcohol en estas comunidades y a la ligereza con que se toma el tema a nivel de la familia.

Enfermedades relacionadas con el consumo de alcohol elevan las cifras de mortalidad entre los latinos de todo el mundo, en especial entre los latinos de descendencia europea. La genética de los indígenas americanos no se caracteriza por generar adicción física al alcohol.

El cáncer de estómago, cáncer de hígado y cáncer de páncreas son enfermedades que afectan con mayor frecuencia a la población hispanoparlantes que a otras. Se cree también que, además del consumo de alcohol, tenga relación la conducta alimenticia de estos pueblos. Aunque todavía no se puede afirmar con certeza, el consumo de proteínas procesadas, ahumadas y quemadas como las que se encuentran en la carne asada y los embutidos guardaría relación con este tipo de cáncer.

En cuanto al consumo de tabaco, cabe destacar la importancia de una política sanitaria eficaz. En Uruguay, gracias a la aplicación de altos impuestos al tabaco (una caja de cigarrillos cuesta lo mismo que 500 g de carne de vaca o res), la prohibición de todo tipo de publicidad de compañías de tabaco, la prohibición de fumar en espacios cerrados y la no habilitación de espacios para fumadores se redujo el tabaquismo entre los uruguayos. Otros países como Argentina y Chile, buscan seguir su ejemplo.

La carga genética

Ligada a una importante incidencia de la carga genética de la población (presencia de un determinado gen HLA DQ2) y a causas ambientales que la desencadenan, la enfermedad celíaca es una patología que avanza increíblemente entre las poblaciones mencionadas. Más frecuente en mujeres que en hombres y con cifras que van desde 1 a 4 celíacos por cada 100 habitantes, los habitantes de España, México, Argentina, Chile, Uruguay y Venezuela se enfrentan a un problema de gran complejidad.

Otra de las enfermedades que afectan más a los hispanos/latinos es la acumulación de cálculos en la vesícula biliar y la inflamación del apéndice. Aparentemente estas patologías obedecen a razones hereditarias y a la alimentación rica en colesterol (grasa animal) y en vegetales verdes. Otra de las posibles relaciones existentes entre el aumento de la incidencia de las complicaciones en la vesícula biliar, incluso el cáncer de vesícula es que el embarazo aumenta notablemente el depósito de barro y cálculos insolubles en este órgano y las mujeres latinas americanas tienen mayor número de hijos en relación con las mujeres de Europa y EEUU.