Cómo tratar bien a un camarero para ser bien atendido

Saber tratar con un camarero, es parte de la experiencia de ir a un restaurante, proporciona una buena atención y hace de la estancia una más agradable.

Como tratar a un camarero
Como tratar a un camarero

Todos hemos ido alguna vez a un restaurante, la frecuencia de nuestras visitas puede ser variable, así como también lo pueden ser el restaurante y el menú, pero hay algo que nunca va a variar… y eso es la presencia del camarero. Estos personajes uniformados tienen la titánica labor de atender a cientos de comensales -de variable humor y educación- con la mejor disposición y una amplia sonrisa, pero ¿Sabes cómo actuar para obtener una mejor atención?

El trato que el cliente le da a un camarero, es esencial a la hora de tener reciprocidad –una buena atención-, pues ocurre habitualmente que, debido a la celeridad de la vida, nos olvidamos de la importante función que cumplen estas personas en un restaurante.
Hemos confeccionado un listado de algunos consejos para tratar bien a un camarero, de manera tal que se pueda aspirar a recibir la mejor de las atenciones.

  • Usualmente los camareros llevan su nombre en el pecho o solapa, algunos se presentan personalmente. Es conveniente llamar al camarero por su nombre y no con sonidos extraños ni apelativos despectivos, de esta forma se muestra respeto y valora lo que está haciendo
  • La labor de un camarero debe ser recompensada, y es una tradición que tras una buena atención se les entregue una buena propina, aunque esto dependerá del restaurante ya que algunas veces la propina viene incluida en la cuenta. En caso de no estipularse una propina incluida en el pago de la cuenta, sea justo con la propina entregada de acuerdo a la atención recibida. Comúnmente se estila dejar el 10% de la cuenta en propinas, pero si desea dejar más adelante
  • Cuando haga el pedido, trate al camarero con respeto. Utilizar la palabra “por favor” y “gracias”, nunca están demás. Siempre véalo al rostro cuando le hable, puesto que a nadie le gusta que se le trate de forma despectiva, y los camareros no son una excepción
  • Si el platillo llega tarde a su mesa casi nunca es culpa del camarero, por lo general el problema proviene de la cocina, así que no se desquite con él. Si la tardanza ha sido muy grosera, hable con el encargado de la atención a los clientes o algún superior en el restaurante
  • Si aún no está listo para pedir, no llame al camarero, odian esperar a la gente indecisa. Verifique la carta con tranquilidad, cuando tenga alguna consulta sobre el menú o la decisión lista, lámelo y haga su orden o las preguntas pertinentes
  • Si el platillo que pidió está mal o no es lo que esperaba, recuerde que el camarero no es el cocinero
  • Algunas personas suelen pedir consejo al camarero del menú o de algún platillo, sea cuidadoso al hacerlo, aunque casi siempre son acertados, a veces no están en la misma sintonía gastronómica que el comensal
  • Si va a dejar propina en efectivo, asegúrese que la reciba el camarero que lo atendió, sobre todo en pequeños restaurantes, ya que en los grandes se suele juntar en un poso común en donde se ve beneficiado todo el personal del restaurante
  • Si el servicio en un restaurante es lento o hay poco personal, es casi seguro que el último culpable es el camarero, no desquite su malestar con él