Estrategias en el arte de la seducción

Estrategias basadas en estudios reales

Arte de la seducción

Dicen que los polos opuestos se atraen y que lo que leemos en las novelas románticas es verdad. Nada más lejos de la realidad; es por eso que hemos reunido algunas estrategias para la seducción basada en algunos estudios. Así que a tomar nota y aprender.

Los polos iguales también se atraen

Buscar una pareja que se parezca a nosotros es más lógico de lo que se cree. El ser humano prefiere una pareja con los mismos intereses, raíces, valores, creencias e inclusive con algún parecido físico. Hace más de un siglo el científico británico Francis Galton descubrió este fenómeno, estudios posteriores confirmaron que “dos polos opuestos sí se atraen”.

La importancia del lenguaje corporal

Si las palabras empieza a sobrar y las frases de amor escasean, recurrir al lenguaje corporal (no verbal) es un buen camino. Mirar a los ojos, sonreír, jugar con el cabello y más gestos pueden empezar con el juego de la seducción. Allan Pease, autor de un libro sobre el lenguaje corporal, a los hombres les gustan las mujeres que dejan descubiertas sus partes vulnerables de su cuerpo, al sentarse, al cruzar las piernas, el movimiento de pies y tobillos. Por su lado los hombres tratan de parecer dominantes y ocupar más espacio, para lograrlo algunos meten los dedos pulgares en el bolsillo y dejan que el restos de dedos apunten hacia los genitales.

La pasión es mejor si es de cerca

Ya saben lo que dicen del “amor de lejos”. Estar cerca de tu “amor”, ya sea al lado de su escritorio o en la calle contigua asegura el contacto visual frecuente, y esto resulta muy útil porque cuando más vemos a alguien a menudo nos gusta más. Es por eso que son tan frecuentes entre vecinos o compañeros de trabajo.

Cuidar el aspecto es importante

Aunque la belleza interior es importante, debemos preocuparnos de la otra “belleza”. A la gente atractiva se le considera casi siempre más inteligente, sensual y exitosa. Según algunos estudios teóricos de evolución social apreciamos más los atributos que aumentan las probabilidades de reproducción. Es por eso que los hombres suelen preferir a las mujeres jóvenes, de pelo largo y brillante, y que cuya cadera mida un tercio más que su cintura: señales de salud y fertilidad. Las mujeres por su parte se sienten atraídas por los hombres altos y mayores que ellas, porque es más probable que cuenten con los medios para mantener una familia.

Las miradas atrapan

Podemos decir que las novelas románticas aciertan en el punto que le dicen “amor a primera vista”. Se ha demostrado que cuanto más tiempo se miran dos personas al conocerse, más se gustan. Y mejor aún si tienen las pupilas dilatadas, ya que estas según un estudio hecho por Eckhard Hess, profesor de la facultad de psicología de la Universidad de Chicago, son atributo físico más atractivo. Hess descubrió que al mostrar a los sujetos del estudio dos fotos de una persona del sexo opuesto (idénticas, excepto por el tamaño de las pupilas), tendían a considerar más atractiva a la de las pupilas dilatadas, aún cuando no notaban la diferencias en la fotografía. Al parecer las pupilas dilatadas revelan excitación sexual.

Amor y emoción

Todo está en el punto intermedio, ya que las experiencias intensas llevan a la atracción sexual. Cuanto más emocionados estamos ante un amante potencial, por lo que sea, desde el miedo hasta la alegría, más atractiva nos parecerá. Las psicólogas Cindy Meston y Penny Frohlich de la Universidad de Texas, quienes pidieron a los sujetos que evaluaran a personas del sexo opuesto antes y después de subir a la montaña rusa. Este efecto se debe a una confusión o transposición de emociones, sea cual sea la causa de que nos palpite con fuerza el corazón, tendemos atribuirlo a la persona con quien estamos y nos sentimos atraídos a ella.

Otra perspectiva

El poeta Ogden Hash dijo “los chocolates funcionan, pero el alcohol es más rápido”. Algunos estudios revelan que los solteros en busca de pareja se muestran menos selectivos cuando la barra está por cerrar. Este fenómeno llamado “efecto del licor en la percepción”, fue descubierto por el profesor de la Universidadd de Texas, Jamie Pennebaker, quien pidió a los clientes de un bar que evaluaran a parejas potenciales tres veces durante una noche ( a las 9, 10:30 y 12 de la medianoche). En efecto, tanto hombres como mujeres parecían más atractivos a la medianoche. Esto significa que estar ebrio impide notar que alguien está feo o viste mal, sino que, cuando está agotado el tiempo para encontrar pareja, cualquiera que ande cerca empieza a verse bien.

Nunca compares

Si los hallazgos de los psicólogos Sara Gutierres y Douglas Kenrick de la Universidad Estatal de Arizona, la evaluación que hacemos de una pareja potencial puede sufrir distorsiones. Estos dos expertos pidieron a varios hombres que evaluaran el aspecto de sus novias o parejas después de haber visto una revista Playboy o después de ver un programa de TV en donde aparecían mujeres bellas. El resultado: sus mujeres les parecieron menos bonitas después de ver estas imágenes. Esto prueba un fenómeno llamado “efecto de contraste”, a causa del cual nuestra percepción de diferencias relativas se distorsiona según el orden en que las veamos. Es decir que si miras un objeto oscuro después de ver uno claro, te parecerá mucho más oscuro que si lo hubieras visto solo o antes que el otro.

Cuidado con las palabras

La diferencias entre los hombres y mujeres se reflejan en los anuncios para encontrar pareja. Según algunos estudios, las mujeres describen principalmente sus atributos físicos, mientras que los hombres hacen énfasis en sus recursos económicos. Cuantos más años confiese tener una mujer, menos respuesta recibirá, mientras que en los hombres pasa todo lo contrario. Para consuelo de las mujeres poco atractivas y los hombres sin dinero, hay una frase que ayuda mucho a esa clase de anuncios: “Soy cariñosa(o)”. Se cree que la gente cariñosa es feliz, sociable, sensata y popular.