Consejos para ser un buen amante: La perspectiva femenina
Estar limpio y perfumado; ambientar la escena del encuentro; darle importancia a la previa; manejar el ritmo; decir las palabras justas; no ser egoísta; tener la mente abierta; tener la mente abierta, darle tiempo a la mujer para llegar al orgasmo.
Estar limpio y perfumado; ambientar la escena del encuentro; darle importancia a la previa; manejar el ritmo; decir las palabras justas; no ser egoísta; tener la mente abierta; tener la mente abierta, darle tiempo a la mujer para llegar al orgasmo.

Para que un hombre sea considerado como un buen amante por una mujer, debe cumplir con algunos requisitos, entre ellos:
Estar limpio y perfumado
Para las mujeres la primera impresión es fundamental por ello es muy importante que el hombre se preocupe por estar limpio, perfumado y bien arreglado para el encuentro sexual.
Ambientar el encuentro
El ambiente en el que se desarrollará el sexo es fundamental para las mujeres. A ellas les gusta que haya velas, música suave, aromas agradables, algo para beber, etc.
Darle importancia a la previa
A ninguna mujer le gusta ir directamente al sexo, salvo que la pasión despertada sea tan intensa. A la mayoría le agrada el coqueteo, el jugueteo erótico previo al sexo; las miradas, los besos, las caricias, los mimos. Unas buenas caricias que recorren suavemente el cuerpo de la mujer y los sujetan con fuerza en determinado momento suelen ser inolvidables.
Manejar el ritmo
Durante el encuentro íntimo, algunas mujeres prefieren lo lento y suave, mientras otras lo rápido y fuerte. Lo importante es que el hombre descubra lo que le gusta a su pareja a través del lenguaje corporal de ésta y la complazca en todo momento.
Las palabras justas
Durante la previa es importante que el hombre entable un diálogo con su pareja, busque conversación, hable de temas que a ella le interesan. Pero luego a la hora de la intimidad, del sexo propiamente dicho, las palabras muchas veces sobran y los cuerpos se entienden perfectamente a través de su lenguaje, sin necesidad de que medien las palabras. Sin embargo, hay mujeres a las que les gusta oír de sus amantes frases de amor, románticas, tiernas, mientras otras prefieren las palabras más chanchas; también hay las que gustan una combinación de ambas.
No ser egoísta
El egoísmo es el enemigo número uno del buen amante. Un hombre que se precie de llevar tal título no puede pensar sólo en su propio placer y dejar el de su pareja de lado. Así que aquellos hombres que se esfuercen por complacer a sus compañeras sexuales serán mejores amantes que los que solamente se preocupen por su satisfacción personal.
Mente abierta
En el sexo lo ideal es no atarse a rutinas ni estructuras, por lo cual renovar, proponer cosas distintas, posiciones sexuales nuevas, juegos y juguetes sexuales, siempre que sean aceptados por el otro, da varios puntos a favor del buen amante.
Darle tiempo a la mujer
Para ser un buen amante es importante darle a la mujer el tiempo necesario para alcanzar el orgasmo. En general ellas tardan más en llegar al clímax y necesitan de mayor cantidad de estímulos para hacerlo. El hombre que se precie de ser un buen amante, deberá esperar a su compañera y hacer todo lo posible por que ella alcance el máximo placer en el encuentro.