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Lo que a continuación les escribo es un “breve resumen” de mi historia con una mujer de la cual me enamoré y por la cual casi termino en el abismo.

Tuve la enseñanza divina pero amarga (hoy puedo verlo así) de tropezarme con una mujer, manipuladora, perversa, narcisista y traidora a quien llamaré Lorena y con quien compartí año y medio de mi vida.

Al principio fue extremadamente encantadora, sensual, pendiente de todo, detallista y muy linda. A sus 40 y + parecía una chica de 30 y pocos. Logré llegar a pensar por lo que ella me decía y mostraba al principio, que era la mujer ideal y que estaba sola motivado a la mala suerte, me confié demasiado con ella, no indagué, dejé las defensas abajo y me involucré sentimentalmente en grado superlativo y justo allí comenzó el calvario. Estuve a punto de perder mi matrimonio, mis hijos, mi familia y lo más importante de todo, mi persona.

Durante este año y medio llegue a convertirme en un perfecto desconocido para todos incluso para mí mismo, era como ir en un auto a 200 Km/Hr y no poder conseguir el volante ni los frenos. Llegué a hacer cosas que jamás hubiese pensado hacer, incluso hoy me parece haber estado soñando durante todo ese tiempo. Descuide mi familia, mis responsabilidades de trabajo, todo giraba en función de ella, sus necesidades y de sus pasmosos cambios de estados de ánimo. Sin darme cuenta me alejé de mis amigos de siempre, de mis habituales rutinas familiares todo para tratar de estar la mayor parte del tiempo con ella una persona de pocos amigos.

Durante este tiempo estuve atrapado en un mar de emociones y desgaste psicológico, con sus desaires y desmanes y al mismo tiempo oleadas de pasión y ternura cuando necesitaba algo. Siempre me mantenía en vilo, sentía que andaba de puntillas para no crear ningún ruido que a ella molestase, ¡que estrés tan perro Señores!

Ella siempre quería saber todo de mí y de mis cosas, pero de ella nada soltaba, no hablaba nada de ella, ni de sus cosas, respecto a su familia todo era escueto y nunca podía entender nada, para ella fue fácil colarse porque soy muy espontaneo en la conversación y ciertamente debo confesar que no sé por qué razón con ella bajé las defensas. Colocaba trabas para muchas cosas, una chica extremadamente pulcra, no solo en su persona sino en las de su casa, cautelosa y muy desconfiada. En varias oportunidades tuve la sensación de tratar con dos personas en el mismo cuerpo.

En cuanto al sexo para no entrar en detalles, sencillamente espectacular. Pero solo se daba en situaciones que ella creía conveniente, por ejemplo si un determinado día todo estaba dado para hacerlo, sencillamente ella decía que no se debía, por cualquier cosa y todo quedaba allí con mi particular decepción y angustia. Hoy puedo darme cuenta que lo usaba magistralmente para conseguir de todo.

Entre en esta relación con ella en una etapa difícil de mi vida, full de trabajo con altas responsabilidades, donde incluso acababa de nacer mi tercera hija. Y fue a los seis meses de relación mas o menos cuando ella empezó a solicitarme definir mi relación matrimonial, creo que para ese momento ya me tenía totalmente medido y ya sabía que podría dejar todo y casarme con ella. Si bien estaba decidido a hacerlo, el amor a mis hijos me mantuvo en casa. Por mi cambio obvio mi esposa empezó con su sospecha y luego se enteró de todo y la cosa se puso aun peor, pero ya para ese momento yo estaba fuera de su alcance prevalecía mi deseo de libertad para iniciar mi nueva vida con Lorena.

Salí de mi cuarto y me mude al de mi hijo. Alquilé un departamento el cual fui amueblando para el momento en que se diera mi salida de casa. Hoy todo parece hasta mentira cuando lo veo desde acá desde afuera. En este tiempo me surgió una línea poética que jamás en mi vida había sospechado tener.

Le llamaba hasta 20 veces al día y mensajes ni se diga, ella se limitaba a atender cuando le salía y los mensajes uno que otro, siempre tenía una excusa, que si lo deje en el carro, lo deje en el cuarto, estaba ocupada etc.

Durante esta etapa de la relación siempre estuvieron presentes las críticas hacia mi persona, diciéndome como debería ser y actuar en algunas circunstancias, los ultimátum de corte se daban por lo menos cada dos semanas, los cuelgues de teléfono y cierre de puertas por 2 o tres días y todas aquella actitudes de niña malcriada. No entiendo como aguanté tanto rollo.

Pero todo esto se daba en forma unidireccional es decir, la mejor aplicación de la Ley del Embudo teniendo ella el lado amplio.

Pero luego de pasado un tiempo (cerca de un año), tanta desconfianza y secretismo de su parte me mantenía en vilo y me despertó una extraña inquietud, a pesar que estaba dispuesto a todo por ella (como dicen las novelas) me causaba mucha intriga, el hecho de no conocer, de no tener claridad en tantas cosas.

Pero un día de marzo 2013 (en pleno esplendor de esta situación) por esas cosas de la vida, llegó a mis manos un recibo de su teléfono y bingo, pude darme cuenta que ella hacía llamadas a un móvil de 8 a 14 veces por día y en horarios que solo son para personas muy cercanas o pareja, sentí un frío que me recorrió todo el cuerpo, me desplomé, ciertamente fueron horas muy confusas y de gran pesar (uno de los peores momentos de mi vida), pero pesar del dolor deje correr un poco la cosa, tomé cierta distancia decidí investigar y vaya que investigué bien, de algo tiene que servir la lógica y el método científico, pa´ que tanta cátedra desde que entramos en la escuela. Así que conseguí bastante información de ella y la persona del teléfono móvil quien resultó ser un tipo mayor que yo (y bastante) un excompañero de trabajo suyo también casado con quien había mantenido una relación según una fuente de esa empresa y seguían llegando cosas, todo para convencerme de la persona que era. Tenía una larga historia de relaciones fracturadas incluso con hombres casados y generalmente bastantes mayores que ella. Que en el camino había fracturado dos matrimonios pero que nunca termino casándose con ninguno.

Luego de tener la información completa decidí abordarla y con cierto teatro, le pregunté porque era tan reservada con el teléfono y me dijo que no era así, ¡para nada, para nada! ¿qué te pasa estas paranoico? ¡nada de eso por favor! ¡ve revísalo! y haciéndose la sobrada me lo pasó y frente a sus ojos fui directo a dos llamadas que había hecho ese mismo día al número de “su excompañero” y que no había borrado (mantenía la bandeja siempre limpia), le pregunté: ¿y estas dos llamadas? ¿quién es este señor? y me dio una respuesta extremadamente burda como para salir del paso y que yo ya esperaba, posteriormente tratando de enderezar la cosa vinieron las inconsistencias en su versiones, después su rabia, ya que yo disponía de un arsenal de preguntas muy bien preparadas y justo allí en el sillón de su sala quedó totalmente expuesta, desnuda y sola con sus tres versiones. Si no me hubiese preparado suficientemente creo que me hubiese engañado nuevamente con sus primera versión y con esos te amo que parecían sinceros.

Ese día al abordarla yo esperaba aunque fuera un miligramo de verdad, pero nada. Hoy sé existen seres de lo más bajos, que no conocen los sentimientos y capaces de hacer daño solo por pasatiempo y que las mentiras pueden muchas veces estar muy bien disfrazadas.

Definitivamente había gente alrededor que quizá sabía de esta situación, amigos comunes que nunca dijeron nada, no sé si para evitarse problemas o que eran parte del cuento.

Busque ayuda psicológica profesional dado lo mal que sentía y la gran confusión que tenia, etapas de dudas y preguntas internas etc. Asi que posteriormente poco a poco empecé a retomar mi hogar, primero con mis hijos y luego con mi esposa a quien gracias a Dios logré redescubrir y con quien hoy llevo una vida matrimonial esplendida.

Respecto a Lorena: Me volví frío con ella después de eso solo trataba cosas comunes que había que cerrar y un día tras una pequeña discusión telefónica no le llamé, ni visité más y aunque ella intentó hacerlo en forma insistente por distintas vías, sencillamente di todo por cerrado.

Adopte lo que dice el manual contacto cero, silencio, indiferencia, y superación contra la gran mentira que se me quiso imponer y en la que yo debo admitir mi responsabilidad.
Fueron tantas cosas que pasé en ese periodo de tiempo que había momentos en que pensé que iba colapsar.

Hoy me siento como renovado contento y seguro de mi familia, y trabajo, aun me cuesta creer que estuve al borde del despeñadero con esta fría mujer y todo lo que pude haber perdido. No sé cómo explicarles pero es una situación de libertad tan grande que sientes que puedes llenar tus pulmones de aire en forma plena.

Por eso hoy recomiendo a toda persona que nunca tome decisiones apresuradas en lo que a relaciones sentimentales se refiere, que dejen que el enamoramiento ese de nos encandila fluya, pero que no tomen decisiones apresuradas y trascendentes en ese periodo y que nunca está mal estar alertas. Sobre todo a aquellos que tienen una relación bonita y estable de pareja que no se dejen arrastrar por el ego y de esta forma eviten situaciones amargas que no siempre terminan bien. Siempre rondan por allí personas que aunque luzcan muy lindas solo andan a la caza de alguien que les pueda brindar uno o muchos beneficios. NO DUDEN NUNCA ESTO.

Creé este blog para comentar detalladamente mi historia y tratar de explicarles a varios caballeros que como yo pudiesen caer en una trampita como esta, que hay que estar muy pendiente de los rasgos más resaltantes que nos ayudan a desnudar las intenciones de ciertas víboras que caminan por las calles y que lucen preciosas. Así como también atender con un consejo de cafetería (que no es malo, pero que no es especializado) a quien pudiese estar atravesando por un problema similar.

Mis saludos y en espera de que mi relato les sirva de algo

Julian Zerpa

julian.zerpa69@gmail.com