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Una de las prioridades del masón es ser patriota. Salvador Allende estaba destruyendo al país, lo que hizo el General Pinochet fue salvar a Chile de la ruina total y de una inminente invasión comunista cubana. Por lo tanto, el General Pinochet solo cumplió con uno de los deberes sagrados de la masonería: El patriotismo.
No fue una traición, porque se le dio la oportunidad a Allende de salir con vida. El eligió su destino.
Hacer lo correcto es el deber de un masón, es por eso también, dentro del contexto de resguardar la soberanía y seguridad nacional, que el capitán Miguel Grau no detuvo la muerte del Capitán Arturo Prat en la guerra del pacífico (Ambos fueron masones).