Redes Sociales como plataforma de posicionamiento de una marca

Las redes sociales han ido evolucionando desde el momento de su creación, parte importante del proceso lo han protagonizado los consumidores y las empresas, quienes se sumaron al proceso y comenzaron a ofrecer búsquedas patrocinadas, entre otras cosas, pero ¿Hasta qué punto se han explotado estos medios para posicionar una marca?

De acuerdo a un estudio hecho por IAB, las búsquedas patrocinadas son las que llevan la delantera en la inversión publicitaria, mientras que la imagen de una marca apenas acapara el 12% de la inversión. La buena noticia respecto de esta estadística es que el porcentaje de inversión en este sentido aumentó en un 5%. El que la inversión haya cambiado se debe a que hay factores que tan bien se han modificado en la vida de las personas, el acceso a una banda ancha más eficiente y la masificación de los medios sociales en todo el mundo son parte del cambio.

Las marcas constantemente buscan oportunidades, y gracias a los factores de cambio antes enunciados, Internet se volvió la mejor de las ofertas puesto que la televisión y su imperio se comenzó a poner en duda cuando se mostraron videos de excelente calidad en redes como YouTube, luego se puso más en duda cuando el streaming se volvió una realidad viable y hoy nada está claro desde que Google y otras plataformas explotan con eficiencia la publicidad en videos y ofrecen medidas de control para los anunciantes respecto de la efectividad de las campañas.

Los videos son una de las apuestas más efectivas para llegar a un público que privilegia al entretenimiento por sobre la información, pero ¿Por qué no ofrecer ambas? Internet es el espacio perfecto para hacerlo, ya que el costo de aparecer allí es tan asequible que todo el mundo puede permitirse ese lujo. Podríamos decir en pocas palabras que Internet es una especie de utopía para los anunciantes, una lucrativa y con pocos riesgos.

Si antes teníamos que pensar en “cómo construir una marca”, hoy tenemos que pensar en “cómo vamos construyendo una marca”. Pasamos de un proceso lineal a uno completamente dinámico que se va haciendo en la medida en que se va comentando con los consumidores lo que pasa en la vida real y no en las oficinas de marketing donde se planean las estrategias clásicas de marketing y publicidad.

Podríamos concluir que siempre las empresas debieron estructurar sus campañas y estrategias de penetración de mercado en los consumidores, sin embargo, hoy gracias a la llegada de los medios sociales se puede ampliar este efecto y volver más sensible a lo que ellos quieren hoy y no quisieron ayer. Si una empresa no se preocupa de lo que dicen los clientes hoy, podrían estar pensando en una estrategia basada en el ayer, y eso sí entrega la delantera a la competencia que emplea los medios sociales como amplificadores del sentir de las personas, así como también como un barómetro de la efectividad de sus productos.