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Mi esposo tiene 49 años, se le cae el cabello, se preocupó por su peso, compra juvenil de ropa, insomnio, da gritos y patadas cuando logra dormir -esto no lo hace siempre-, ha sido infiel con una mujer que podría ser su hija, muy irritable, cínico, ha tenido problemas laborales -ha tenido ganas de renunciar a su trabajo pues ha dicho que no se le valora-, tenía baja la testosterona, se le dio inyecciones y el resultado fue violencia y adulterio -que no había realizado antes-, se ha aislado, se ha ido de la casa, no logro que me diga como está la comunicación con él es prácticamente nula, consume mucho café, consume alcohol, marihuana y quien sabe que más, sus piernas lucen con menos musculo, ha faltado a compromisos laborales. Me han dicho que le tengo que apoyar pero al irse de la casa y al no poder establecer una comunicación con él francamente no sé que hacer y yo tampoco la estoy pasando nada bien con esta situación que me tiene desesperada, triste, tensa, con ataques de ansiedad, pesadillas, he llorado mucho, he pedido morir, al principio de esta fase intenté suicidarme, me destrozó su confesión de adulterio, lo amo y estoy preocupada por él, dedicarme a vivir, a realizar mis tareas me cuesta mucho, tengo amigas que me apoyan pero pienso mucho en mi esposo y tiendo a pensar en negativo todo lo que estará haciendo y me duele no saber de él. Su transformación ha sido radical.