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Cuando una prostituta se disfraza de novia

Muchas relaciones amorosas tienen como el mayor bastión el sexo, pero no siempre este se da por un mutuo y desinteresado acuerdo.

Cuando las novias cobran por sexo
¿Sexo o amor?

Muchas relaciones amorosas tienen como el mayor bastión el sexo, pero no siempre este se da por un mutuo y desinteresado acuerdo.

Si buscamos en el Diccionario de la Real Academia Española (DRAE) la palabra prostituta, nos dará como resultado un simple pero conciso significado: “Persona que mantiene relaciones sexuales a cambio de dinero”; a lo que podría añadir “y demás favores económicos”, al menos al hablar de este tipo de casos.

Cuando una relación amorosa empieza, el sexo es un tema que se va a dar tarde o temprano, y ahora que las relaciones son más “abiertas a los temas sexuales”, el sexo sucede más temprano que tarde. Siempre el sexo en una pareja debe ser por mutuo acuerdo y consenso de ambas partes, esto presenta algunos matices que tienen que ver con la religión, cultura y educación, pero al final se da si ambos los desean, así de simple. Hasta ahí todo parece que es lo “normal”, pero ¿Qué sucede cuando el sexo entre en una pareja se convierte en una transacción económica?, ¿No esto una forma de prostitución?

Que una novia le pida algún tipo de favor económico o material al novio a cambio de favores sexuales no es nuevo, quizá tan antiguo como la prostitución misma. No estoy diciendo que esté mal hacer regalos o dar ayuda económica a nuestra novia o enamorada; lo que está mal es que sea por un favor sexual, por que eso aquí y en la China es prostitución, y que me disculpen las señoras prostitutas por compararlas con este tipo de mujeres que se aprovechan de su pareja con la fachada de “novias” y utilizando el sexo como un arma.

Esto sucede en muchas instancias de la relación y de muchas formas, como siempre nosotros los hombres somos los últimos en darnos cuenta. Casi siempre las mujeres que están acostumbradas a este tipo de prácticas, lo hacen de manera gradual, es decir que los primeros encuentros sexuales son “gratis”, pero poco a poco van manipulado a su pareja para que estos les den después una “ayudadita económica” o un “regalito”.

Por ejemplo, si te acercas a tu novia muy cariñoso, pero ella no puede pensar en sexo porque tiene un problema, obviamente tú querrás ayudar resolver el problema. Claro que si el problema tiene un costo económico, y muchas veces un valor fijo, una suerte de tarifa, las cosas serán diferentes. Una vez que resuelvas ese “problemita” metiendo la mano a tu billetera podrás hacer el amor a tu novia. ¿Fácil no? Si pues, pero igual, es prostitución.

Ahora, imaginate que llegas a buscar a tu novia sin un “regalito” (algo simple y pequeño), ella se muestra distante y obviamente nada de sexo; pero llegas con un costoso regalo, ¿adivina qué?, esa noche habrá sexo.

No digo que sea una constante, ni mucho menos generalizo, pero si tu novia siempre que van a tener relaciones sexuales te sale con algún problema económico, lo más probable es que tengas en frente a una prostituta disfrazada de novia.